Alguna vez hiciste prisionera un ave?
fuiste capaz de recortar su vuelo?
No era suficiente el contemplarla?
la seducción de una palabra no fue basta?
Ya sé que me dirás que algunas aves
solo en cautiverio cantan
Pero también es cierto que tú no sabrás nunca
si ese canto no es llanto por las alas cortadas
Solo puedo decirte, probar no cuesta nada,
que ella extienda sus alas, que su trino se esparza
que sola reconozca la que siente su casa
y si ahíta de brisas un día te reclama
solo extiende la mano, que ya no habrá distancias.
No te ates a su vuelo, ni intentes emularla
no te hagas tu mismo esa mala jugada
solo detén el tiempo al día en que no estaba
y prolonga ese limbo, no crees la nostalgia
que sino es un recuerdo, no puedes olvidarla.
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Suspendido,
casi ingrávido
con la mente perdida en ti.
Seguramente,
uno de esos amores callados
que se extinguen solos sin haberse
abrasado
El
espectro de lo coincidente
no existe en mi mundo.
Tengo la
virtud de sentir y creer
que
la causalidad es capaz de unir...
pero es tan utópico como
pensar que quizás
será alguien quien sostenga mi mano al
final.
De todos modos, mi niña...
No me arrepiento!
...de
ocupar mis días con tu rostro.
No me arrepìento!
...de
sentir acelerado el cuerpo entero
ante tus letras.
He
descubierto, gracias a tí.
que mi espíritu sigue tan vivo
como
siempre!
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Historia
que recién comienza
aunque en mitad de un libro
de hojas
gastadas, sin tiempo.
De tiempos gastados sin hojas escritas.
De
pasado escrito con humo.
Un borrador apenas
de lo que aun
no comienza
habiendo comenzado a destiempo.
Y te imagino
sola,
un libro
y leyendo.
Aunque sabrás:
Las
grandes historias
se marcan a fuego,
se escriben en
pieles,
se impregnan de olores,
sentidos... sabores.
Las
grandes historias
no están en papeles.
Se escriben a
duo,
se palpan, se sienten,
dejan de ser verbo
y
generan recuerdos.
Aún así...
te imagino sola,
un
libro
y leyendo.

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