Ya sé que van a decirme que nosotros somos un país en vías de desarrollo y que en cierta medida somos quizás uno de los países menos afectados por los quilombos que están armando en el hemisferio Norte, pero no existe duda que a la corta o a la larga estos despelotes nos la cobrarán igual que a cualquier otro, hayamos contaminado o no.
Mis preguntas van algo más allá que la mera participación.
¿Tiene algún sentido firmar un protocolo donde la firma de los 3 países que generan mayor polución no participan?
¿No es casi risible que aún habiendo firmado el acuerdo uno o varios países decidan luego no seguir refrendándolo para evitarse las multas fijadas por incumplimiento?
Si para algunos va a seguir el "viva la pepa" ¿Porque acotarnos el resto?
¿Por miedo al juzgamiento de parte de las generaciones futuras. Acaso habrá quién nos juzgue si países monstruos como USA, China o India continúan igual?
Yo hace tiempo aprendí que "La historia la escriben los que ganan" (Gracias Lito) y dudo con todo esto que haya una historia que escribir.
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